El huerto da trabajo todo el año pero cada mes requiere de unos cuidados específicos. Además, debemos saber qué plantar, trasplantar y cosechar mes a mes en el huerto para optimizar el cultivo. Es recomendable que pienses desde el primer momento en la sucesión de cultivos a lo largo del año (planificación mes a mes)
En este libro tienes algunas orientaciones sobre los retos que se te presentan cada mes, cuáles son las hortalizas que puedes plantar y cosechar a lo largo del año y como cuidarlos en cada época.
Recuerda que la horticultura requiere dedicación diaria, pero que las recompensas valen la pena.
La diversidad es una pieza fundamental en la sostenibilidad de los sistemas vivos y de los sistemas agrarios. Cuanto más diversidad, más capacidad de autorregulación de los ecosistemas, puesto que el amplio reservorio genético permite hacer frente a las posibles perturbaciones, a las crisis, y adaptarse a los cambios ambientales, como por ejemplo, el cambio climático.
La cultura agraria valenciana es de las más ricas del mundo en diversidad de cultivos. A pesar de la erosión genética producida en las últimas décadas fruto del cambio de modelo agrario de mediados del siglo XX, la tarea de selección y cuidado de nuestros agricultores y agricultoras durante años ha permitido que todavía hoy en día las tierras valencianas conserven mucha diversidad en los campos. Pero esta diversidad continúa estando en peligro de extinción, por lo cual hay que conservarla bien.
La propuesta de este catálogo es la de recuperar estos valores propios, nos pide que conozcamos y consumamos las variedades que hemos heredado, y que ofrecen posibilidades de cultivo mucho más ricas y positivas que las variedades comunes que nos ofrecen las empresas de semillas. Todas y todos estamos llamados a participar en esta conservación activa de nuestros recursos fitogenéticos y nuestra cultura, en nuestras parcelas, en los mercados locales y en nuestras mesas. El reto tiene mucho interés e importancia, ¡participemos en él!
Con la manipulación y el cambio de los agricultores hacia una mentalidad de producción industrial, ha habido un incremento de prácticas degradadoras y extractivas, tanto en los países industrializados como el resto del mundo, todo ello sin tener en cuenta a LA TIERRA. Se nos ha dado una imagen de un falso progreso, de una productividad infinita, con lo que se consolidaron formas de agricultura intensivas en el uso de productos agroquímicos para la regeneración de la fertilidad y, con ello, muchos agricultores han perdido toda la relación con el suelo y el respeto a los ciclos vitales de la materia orgánica y su relación con la fertilidad sostenida del suelo.
Hoy en día, los nutrientes, en gran parte, no provienen de suelos biológicamente activos, sino de la industria con gran costo de capital y energía, tales suelos son sobreexplotados y, cada día, se empobrecen y agotan más.
En nuestro huerto tenemos que cambiar ese «chip» de producir sin tener en cuenta el suelo, la tierra donde sembramos y plantamos. Es un organismo vivo.
Documental sobre el proceso de transformación de unas tierras maltratadas y esquilmadas, en una granja agroecológica vital, haciendo uso de la interconexión con la naturaleza para recuperar la salud del suelo, maximizando la biodiversidad y cultivando los alimentos de una forma ecológica y medioambiental.
Este curso se realizó lo días 17/18 de diciembre en el huerto. es el primero de otros que se irán realizando durante el año 2023, sobre una propuesta de actividades presentadas por Pankara al Ayuntamiento.
Estas actividades responden a la necesidad definida por parte de la Concejalía de Transición Ecológica del Excmo. Ayuntamiento de Castelló de la Plana de organizar una campaña de actividades y talleres para la dinamización de los huertos urbanos de la ciudad, cuya finalidad responde a las necesidades formativas detectadas por el Ayto. de Castelló de la Plana a las personas usuarias de los distintos huertos urbanos existentes en la ciudad promovidos por el propio Ayuntamiento, a través de la cual se pretende dar a conocer otra forma de hacer agricultura diferente al modelo agroindustrial que se ha venido desarrollando en las últimas décadas (y que muchos usuarios, aún desconociendo, practican sin tener en cuenta que las parcelas de los huerto son cedidas para realizar un cultivo agroecológico)
Es una pena que muchos de los usuarios de los huertos no tengan estos cursos en su agenda. Los cursos, en palabras del concejal en el día de la presentación, se consideran necesarios porque realmente se ven las deficiencias que los usuarios tienen respecto a la ecología y el medioambiente, por lo que la concejalía de Transición ecológica quiere que la cesión de una parcela venga acompañada de una labor, por parte de lo usuarios, en las áreas de ecología y medioambiente.
INTERCAMBIANDO IDEAS
Actividad día 17: Agricultura ecológica, regenerativa y sostenible. El compostaje (I).
Problemas que generan la agricultura convencional, en el medio ambiente, y la sociedad.
Las soluciones pasan por recuperar la alimentación saludable y de calidad, favoreciendo y promoviendo una producción sostenible y justa con un consumo responsable que promueva una alimentación sana. Valorando la dieta ecológica mediterránea variada e invitando a plantar y probar la cantidad de hortícolas cultivables en la zona así como las variedades locales, promocionando los productos ecológicos, locales y recuperando tradiciones, etc.
Pero se necesita para el cambio recuperar unos principios y conceptos básicos. Diferenciarse respecto a la agricultura convencional. Esto ha hecho evolucionar una normativa y regulación de la agricultura ecológica en España y la UE.
Recuperar tradiciones agrícolas antiguas con enfoques científicos nuevos. Esto se concreta en las técnicas de manejo actual de huertos agroecológicos, y sus buenas prácticas asociadas. Se puede observar en la evolución del manejo del huerto a lo largo del año.
Los diferentes métodos de agricultura ecológica siguen unos principios que la unifica aunque diversifica en enfoques, como serían. El método Biodinámico, Permacultura, Agricultura Regenerativa, Müller, Jean Pain, Fukuoka, métodos tradicionales, etc., que expondremos para abrir las mentes a la diversidad de formas de hacer, profundizando en las características de cada uno, origen, principios, técnicas y ventajas.
GENERANDO BOCASHI
Actividad día 18: El suelo como un ente vivo. Generar Bocashi.
Se habló de la composición y comportamiento del suelo. Factores y elementos que intervienen en su formación. Tipos de suelo, estructura física y química. La nutrición de las plantas. Los minerales del suelo y principios de asimilación de estos. Los microorganismos, su importancia en la agricultura y procesos de degradación y reactivación del suelo. Rol de la materia orgánica en sus diversos estados en el suelo, acolchados, humus, etc.
Mediante diferentes métodos, se realizaron prácticas y diversas pruebas para la caracterización de la textura de nuestro suelo, de su estructura y de su carga microbiológica, para así poder aplicar métodos más adecuados para mejorarlo.
Así mismo, realizamos un taller de elaboración de abono fermentado llamado bocashi, que deberá voltearse en los próximos 15 días hasta que esté maduro. Sobre este tema, José Antonio Colinas nos ha preparado el siguiente manual. Muchas gracias por tu labor.
Enfermedad fúngica aérea causada por diversas especies del género Erysiphe (E. baeumleri, E. difusa, E. pisi, E. polygoni, E. trifolii, etc.). Afecta a prácticamente todas las leguminosas (guisante, veza, haba, judía, garbanzo, lenteja, altramuz, latiros, alfalfa, etc.).
El inóculo primario en el ataque a una parcela puede provenir de restos de cultivo o ricio de otras plantas susceptibles, o bien por esporas transportadas por el viento desde otras parcelas. También puede transmitirse por semilla.
Los condicionantes de temperatura suave o cálida (15-35oC, óptimo 25-28oC) con humedad moderada (>60-70%) durante 4 o 5 días y el rocío favorecen su desarrollo. El viento favorece su dispersión. Sin embargo, las precipitaciones abundantes pueden lavar el hongo de la planta, especialmente en sus primeras fases de desarrollo.
Oídio en el calabacín
CICLO SÍNTOMAS Y DAÑOS:
Pequeñas manchas cloróticas que suelen comenzar en las hojas más bajas. Al crecer adquieren un aspecto pulverulento blanco o agrisado. Se distingue fácilmente de otras enfermedades porque las manchas se desprenden con facilidad al pasar el dedo. Pueden llegar a cubrir toda la hoja, tanto en el haz como en el envés, y afectar a todos los órganos aéreos de la planta. Finalmente, las manchas necrosan.
Las pérdidas se relacionan con reducción de la superficie fotosintética.
La característica más relevante, de este agente causal de esta enfermedad vegetal, es que no se trata de una única especie fúngica, sino de un conjunto de hongos, que tienen como característica común el ser biótrofos obligados. Es decir, sólo son capaces de vivir, crecer y esporular a expensas de las células vivas de la planta huésped. Aunque también son capaces de producir estructuras de resistencia (esporas) que le permiten sobrevivir en condiciones adversas y dispersarse a través del viento.
El principal síntoma de infección es cuando las hojas se cubren, principalmente en el haz, de manchas de aspecto algodonoso de micelio gris blancuzco a blanco con simetría radial. Dichas manchas crecen y llegan a ser coalescentes hasta cubrir por completo la hoja. En un ataque fuerte se observa la aparición del hongo también en el envés de las hojas e incluso en los tallos. Las partes afectadas, principalmente las hojas, se tornan amarillas, posteriormente se secan y caen.
No requieren agua líquida para su desarrollo, pero sí humedad ambiental. Les favorecen las primaveras muy húmedas (en torno al 70-80% de humedad relativa) y de temperaturas suaves. Desaparecen en pleno verano, siempre que el termómetro pase de 35ºC, para resurgir en otoño.
Estos hongos se manifiestan inicialmente en plantas aisladas pudiendo cubrir posteriormente todo el cultivo. En nuestros huertos los cultivos principalmente afectados son: las cucurbitáceas (calabacines, pepinos, melones, sandías, etc.), las solanáceas (tomates, pimiento, etc.), las leguminosas (guisantes, alubias, etc.), las crucíferas (coles, mostaza, etc.), los cereales (trigo, maíz, cebada, etc.), las lechugas, las acelgas, la menta, las fresas, las vides y los frutales, principalmente rosáceas (manzanos, ciruelos, melocotoneros, perales, nectarinas, albaricoques, cerezos, etc.). También afectan a muchas plantas de jardín, como rosales ornamentales, claveles, crisantemos, begonia, etc. y forestales como quercus y castaños, entre otros.
Oídio en el guisante
Daños ocasionados
Ataca hojas, yemas y brotes ralentizando su crecimiento, reduciendo su capacidad fotosintética, y por ende la productividad de los cultivos. En casos extremos las hojas se amarillean, se secan y caen, pudiendo acabar con la vida de la planta.
También afecta a flores y frutos, reduciendo las cosechas y originando frutos defectuosos. Los productos elaborados con estos se ven igualmente afectados (ejemplo: vinos, sidras, etc.).
¿Por qué aparece el Oídio?
Su aparición suele ocurrir en ambientes con una humedad relativa elevada. Riegos por aspersión, o lluvias prolongadas con temperaturas de entre 10 y 20 ºC, resultan óptimos para su crecimiento. Un exceso de nitrógeno debido a un abonado también excesivo favorece su aparición, ya que esto obliga a la planta a absorber más agua de lo normal.
Una ubicación excesivamente sombreada que provea de condiciones de poca luz, la mala elección de un cultivo que se encuentre poco adaptado a las condiciones de nuestro huerto, cultivos pobres genéticamente y exceso de espesor de follaje con poca ventilación entre cultivos, se convierten en factores de riesgo añadidos a la temperatura y humedad.
Tratamientos ecológicos
El control de ésta enfermedad pasa por actuar de forma preventiva, corregir sus causas y evitar su propagación. Éstos son nuestros consejos en este sentido:
Tratamientos preventivos:
Favorecer la biodiversidad de nuestros suelos y sustratos: en tierras inoculadas con Trichoderma sp, un hongo antagonista de hongos patógenos se disminuye su riesgo de aparición. Los inóculos pueden adquirirse a nivel comercial.
Micorrizas: son los hongos beneficiosos que se asocian a las raíces de nuestras plantas, las protegen de enfermedades y las mantienen vigorosas. los inóculos también pueden adquirirse a nivel comercial.
Cultivos adaptados: es recomendable elegir especies que se encuentren mejor adaptadas a las zonas de humedad, a la hora de planificar nuestros huertos.
Cultivos diversos: asociaciones de cultivos favorables que se potencien y aumenten la resistencia a enfermedades y plagas. Así como una buena rotación para evitar la reaparición de la enfermedad.
Respetar el espaciado entre cultivos: no plantar muy denso. No sólo favorecerá la aireación, sino que también hará que nuestros cultivos sean más productivos evitando la competencia por los recursos.
Aireación, clareo y podas: la falta de aireación facilita la colonización por parte del hongo, esto puede ocurrir en aquellos casos que el follaje sea demasiado denso y apretado. Debe tenerse especial cuidado en invernaderos y terrazas acristaladas. Por otro lado, cabe destacar que los clareos y las podas oportunas pueden actuar de modo preventivo. Si el hongo ya se encuentra instaurado, las heridas causadas por la manipulación podrían favorecer su propagación.
Hilos de cobre: enrollados en los tallos, trasfieren a la planta iones de cobre que dificultan el desarrollo de hongos. Esta técnica se utiliza con frecuencia en tomateras.
Tratamientos de control:
La infección con oídio es muy rápida, una actuación efectiva será aquella que se realice dentro de las primeras 24 a 48hs.
Oídio en las tomateras
Prácticas
Eliminar las partes afectadas: para evitar la propagación a otras hojas y tallos y también entre plantas. Debemos de tener especial cuidado a la hora de la manipulación. Es preciso una correcta higiene de manos, utensilios y herramientas con el fin de no contaminar las plantas sanas. También es preciso eliminar restos de cultivos que puedan actuar como reservorio.
Eliminar hierbas adventicias: plantas como la correhuela son atacadas por el oídio, actuando como reservorio. De ellas pasa a nuestras plantas por el viento.
Preparados ecológicos
Purín o decocción de cola de caballo: el alto contenido en sílice de esta planta, propicia la formación de paredes celulares más recias impidiendo la implantación de patógenos. Además, contiene una saponina tóxica para los hongos denominada “equisetonina”. Todo ello la convierte en un excelente fungicida tanto de uso preventivo como curativo. Sus preparados pueden potenciarse disolviendo en ellos quelato de hierro.
Bicarbonato sódico: en una dilución al 1%, con unas gotas de aceite y otras de jabón líquido actúa como preventivo.
Dilución de peróxido de hidrógeno: agua oxigenada diluida en agua (75 ml para 5l de agua), combate síntomas primarios.
Suero de leche: al 5% o leche o yogur al 10%, son fungicidas debido a la presencia de ciertos aminos, fosfatos y sales de potasio. También cambian el pH de las hojas lo que mata o impide el desarrollo del hongo. Estas mismas sustancias actúan como abono foliar estimulante y protector.
Ajo y guindilla: macerados en agua o en infusión, pueden actuar de manera preventiva y combatiendo síntomas primarios.
Propolis: el propóleo es un producto elaborado por las abejas a partir de sustancias resinosas que recogen en las yemas de los árboles, arbustos y plantas más pequeñas. Las abejas lo colocan a la entrada de la colmena, con el fin de sellar todas las fisuras y evitar la entrada o presencia de cualquier parásito o enfermedad. Aplicado a la agricultura resulta un buen fungicida natural y controla los microorganismos patógenos al obstaculizar su entrada a través de los brotes tiernos, actúa como antiséptico y ayuda a la planta a aumentar sus defensas naturales.
Sales minerales de azufre: su aplicación tanto en forma de polvos como en dilución resulta fatal para el oídio, e inocuo para el ser humano si respetamos los tiempos de seguridad adecuados. Aun así, es recomendable lavar los frutos y hojas antes de consumirlos. Cabe destacar que estos minerales no sólo atacan a los patógenos sino a los hongos beneficiosos del suelo, por lo que su utilización debe ser comedida. Si la planta se encuentra plenamente invadida es preferible deshacernos de ella, su productividad se verá plenamente mermada y no volverá a recuperarse en su totalidad.
Nota: el azufre en disolución debe suministrarse a temperaturas inferiores a 32º para evitar la aparición de quemaduras, siendo las horas más propicias las de las mañanas y las tardes.